Hay quien compra comida y de todo como si no fuera haber un mañana, pero sí que lo hay, siempre lo hay.
A unos les sobra y otros padecen mucha necesidad, tanto anmales humanos como no humanos.
La cuestión es concienciarse de que lo que no necesitamos, lógicamente debe beneficiar a otros.
Concienciarse de guardar no para sí, si ya se tiene, sino para hacer obras de caridad con los seres más necesitados.
Hay que ser solidarios con nuestra propia especie y con las otras especies no humanas.
El hombre no es el centro de la creación pero sí el que acapara en sí todos los beneficios.
Hay que saber que todo lo que tenemos realmente lo tenemos en usufructo. Allí ... no nos vamos a llevar nada de nada.
Sin nada nacemos y nada nos llevaremos, lo cual quiere decir que en nuestras manos está distribuir la riqueza de la mejor forma posible entre quienes tienen necesidad.