San Marcos fue uno de los evangelistas autores de las Escrituras que componen la Biblia. San Marcos es el patrón de los leones y se le atribuyen numerosos milagros. Junto con su padre Aristopolus caminaba un día cerca del río Jordán, cuando se encontraron con una parejas de leones que los miraron interesados en sus personas como alimento para ellos. Y, cuando estubieron a punto de atacarlos, Marcos rezó a Jesús pidiendole que los leones no los atacaran; y al terminar la oración los leones cayeron al suelo muertos. San Marcos viajó a Egipto y extendió alli y por África el Cristianismo. Fue el primer obispo de Alejandría, Egipto. En el año 68 dC, fue encarcelado y en su cautiverio tuvo visiones de ángeles y oyó la voz de Jesús antes de morir. Tras de su muerte unos marineros robaron de su cuerpo algunas reliquias y las llevaron a Venecia, donde se construyó la catedral de San Marcos.