La alimentación de los jilgueros es de tipo granívoro y va de acuerdo con la adaptación del aparato digestivo, características del pico, su intestino y patas. El pico está adaptado para comer diferentes tipos de semillas, base de su alimentación.
El jilguero tiene necesidades en cuanto a su nutrición que vienen a estar condicionadas por factores internos al propio organismo y por otros factores medioambientales como la edad, el peso, la actividad, la humedad y la temperatura externa.
Las necesidades alimenticias varían según cada jilguero. No es igual un poyito recien separado de sus padres que de un jilguero ya adulto que ha terminado de crecer.
Cuando se hace adulto aumenta de peso y actividad, por tanto, va a necesitar mayor cantidad de comida y energía. Igualmente un pájaro que vive en un espacio amplio necesita mayor energía que el jilguero que vive en una jaula pequeña.
Cuando la temperatura desciente las necesidades de aporte energético ascienden.
Hay que tener en cuenta que la dieta debe ser regular, pues los cambios bruscos en la misma pueden modificar en la microbiología intestinal o facilitar la proliferación de bacterias patógenas. Los cambios en la dieta deben ser efectuados siempre de forma progresiva.
Por su riqueza en flavonoides, las semillas de los cardos son antioxidantes, muy nutritivas y saludables. Los glúcidos y las grasas tienen función energética y, por su parte, las proteínas tienen una función plástica porque forman parte de las estructuras del mismo organismo.
Otras plantas silvestres óptimas para la consumición de los jilgueros son las achicorias, amapola, avena, bolsa de pastor, cerrajas, diente de león, girasol, panizo, sorgo, verdolaga, vara de oro, etc. Las plantas silvestres las podemos aportar a la dieta a diario y durante el año en cualquier época.
Son semillas beneficiosas y consumidas generalmente por el jilguero el alpiste, que es la semilla base y debe ser de óptima calidad; la adormidera, avena, avena decorticada, cañamón pequeño, colza, sésamo, linaza; es buena la lechuga negra, lechuga blanca; la perilla, saludable aunque no debe estar en elevada proporción.
Una mezcla utilizada por algunos criadores de jilgueros y con muy buenos resultados es alpiste 18%, negrillo 18%, perilla blanca 14%, lechuga blanca 14%, semillas de salud 12%, achicoria 6%, colza 6%, linaza 2%, cardón 2%, cañamón 2%, lechuga negra 2%, sésamo 2%, bella de noche 2%.
Los criadores suelen colocar sólo alpiste en comedero independiente para que puedan comer cuanto deseen. Si en la mezcla no existiese el alpiste, los jilgueros engordarían de forma excesiva, la obesidad un problema para la salud y para la reproducción, tanto el individuos machos como para hembras, que presentarán dificultades en la puesta.