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La 'brigada canina' da el último golpe contra el uso de veneno en el campo
                   
Perro muerto por su contacto con cebos envenenados. | F.G
ELMUNDO.es | Madrid
El pasado septiembre, la detención en Ronda (Málaga) del presidente de 
una asociación silvestrista de la zona, por la colocación de cebos 
envenenados en una finca de su propiedad, volvió a reabrir un tema de 
especial gravedad para el medio ambiente y la fauna ibérica.
                
            Gracias a la intervención de la brigada canina europea 
contra el uso de veneno, se encontraron en la finca restos animales que 
presentaban signos de haber sido envenenados. Según declaró el detenido,
 pretendía proteger a sus animales de posibles depredadores que pudieran
 acceder a su propiedad. Pero el caso es aún más grave debido al lugar 
en el que se produjo: la zona es de gran importancia ecológica debido a 
que en ella se lleva a cabo un programa de reintroducción del 
quebrantahuesos, especie amenazada.
El uso ilegal del veneno en el medio natural, es la principal causa de 
desaparición de especies protegidas como el águila imperial o el 
quebrantahuesos. Y supone una amenaza grave para el lince, el lobo o el 
oso. Una cantidad de especies que da una idea sobre la gravedad del uso 
de veneno.
Por este motivo, el ayuntamiento de Ronda y la Fundación Gypaetus 
(organización en defensa del quebrantahuesos) se presentarán como 
acusación particular en el proceso contra el detenido. El acto está 
tipificado por el código penal como delito contra la fauna y la flora.
Un paso más de un ayuntamiento, el de Ronda, pionero en la lucha contra 
el uso de veneno en el campo y en la creación de las Redes Europeas de 
Municipios contra el Veneno.
Esta iniciativa comunitaria ha significado la puesta en marcha de una 
verdadera lucha organizada contra este grave problema de salud pública y
 ha permitido unir esfuerzos para lograr un medio natural más sano.
Precisamente la adopción de acciones legales a través de la acusación 
particular es uno de los compromisos fundamentales adquiridos por los 
ayuntamientos constituyentes de las Redes Europeas de Municipios contra 
el Veneno.
La iniciativa de las redes europeas tuvo su origen en el proyecto LIFE 
"Acciones innovadoras contra el uso ilegal de cebos envenenados en áreas
 piloto mediterráneas de la UE", un instrumento de apoyo financiero a 
iniciativas de defensa del medioambiente. Se desarrolla desde finales de
 2010 en ocho áreas piloto europeas: cuatro en España, dos en Portugal y
 dos en Grecia.
Precisamente el área piloto de la Serranía de Ronda, Serranía de Cádiz y
 Campiña de Jerez fue una de las zonas elegidas para formar parte del 
proyecto. Lugares donde la lucha contra el uso de veneno en el campo no 
descansa.
        
