Los alimentos de humanos que no deben comer los perros son diversos, numerosos, así que debemos tener cuidado porque ellos dependen de nuestro buen hacer. Hay que evitar que nuestra familia perruna coma algunos productos que pueden incluso ser saludables para las personas pero pueden resultar incluso letales para los animales.
Ya sabemos demás lo complicado que nos resulta comer con él al lado, es muy difícil eesistirse a su mirada y generalmente lo que hacemos es sucumbir ante sus demandas. Sin embargo hay que tener r cuidado con lo que le damos ya que algunos alimentos son buenos para los humanos pero no para los perros.
Bajo ningún concepto le daremos nada de alcohol, las bebidas y los alimentos con alcohol pueden ser mortales potencialmente para los canes. También pueden causar vómitos, diarrea, afectación en la coordinación, dificultad para respirar, depresión del sistema nervioso central, temblores, acidez anormal de la sangre, coma.
Tampoco pueden tomar café, té y productos con cafeína. Los granos de café, el té y los refrescos energéticos también son peligrosos para los perros, la razón es que los canes son más sensibles que los humanos a los efectos de la cafeína. La ingesta incluso de cantidades mínimas de café, bolsas de té puede causarles fácilmente la muerte a perros o gatos pequeños. La sintomatología por intoxicación por cafeína cursa con síntomas como
- la hiperactividad de leve a grave
- inquietud
- vómitos
- taquicardia (frecuencia cardíaca elevada)
- hipertensión (presión arterial elevada)
- ritmos cardíacos anormales
- temblores
- hipertermia (temperatura corporal elevada)
- convulsiones y
- colapso.
Lo mismo que sucede con la cafeína y con el café, el chocolate contiene en las semillas de cacao metilxantinas, que pueden provocar
- vómitos y
- diarrea,
- jadeo,
- sed y
- micciones excesivas,
- hiperactividad,
- ritmo cardíaco anormal,
- temblores,
- convulsiones
- e incluso la muerte de los perros.
No todos los tipos de chocolate son iguales de tóxicos pero por eso mismo es más seguro mantener a nuestro perro alejado de todos los tipos de chocolate. Es más peligroso el chocolate negro que el chocolate con leche. El chocolate blanco tiene más bajo nivel de metilxantinas, mientras que el chocolate que se usa en repostería tiene el nivel más alto.
Los humanos pensamos desde nuestro punto de vista en las manzanas como un alimento sano, pero las semillas son tóxicas para los perros ya que contienen cianuro y pueden ser especialmente tóxicas cursando proceso de debilitamiento. Sin embargo la carne de la manzana es buena, con lo cual hay que darle trocitos de manzana, evitando darle las semillas.
Excepto en la parte carnosa de alrededor del carozo, las cerezas contienen igualmente cianuro, que interrumpe el transporte de oxígeno celular, esto significa que las células sanguíneas del perro no pueden obtener oxígeno suficiente, según afirma el American Kennel Club (AKC). La sintomatología de intoxicación por cianuro presenta un cuadro de
- pupilas dilatadas,
- dificultad para respirar y
- encías rojas.
Los carozos de los duraznos o melocotones igualmente contienen cianuro y por tanto son venenosos para los perros.
Los tallos, hojas, cáscaras, frutos y las semillas de los cítricos tienen ácido cítrico en diversas cantidades y aceites esenciales. Pueden por ello causar
- irritación
- depresión del sistema nervioso central en cantidades significativas.
Las uvas, pasas, sultanas y las grosellas para los canes son tóxicas y su ingesta, incluso si es en pequeña cantidad provoca insuficiencia renal grave y aguda.
También son perjudiciales los aguacates. Su hueso, piel y hojas contienen persina, que es una toxina fungicida que puede produce graves problemas de salud y también la muerte, en muchos animales. Puede producir vómitos y diarrea igualmente.
Las cebollas son tóxicas para los canes porque contienen disulfuro de N-propilo, que produce la descomposición de los glóbulos rojosy consecuentemente anemia en los perros. Esta toxina provoca un daño oxidativo en lglóbulos rojos al adherirse a las moléculas de oxígeno de sus glóbulos rojos, con lo que reduce la capacidad de estos para el transporte de oxígeno.
El ajo, lo mismo que la cebolla, el cebollino y puerro, forman parte de la familia de las plantas allium y es venenoso para los perros. El ajo tiene la particularidad de ser unas cinco veces más potente que la cebolla y por eso algunos perros son muy sensibles a él. Los síntomas pueden incluir
- encías pálidas,
- ritmo cardíaco elevado,
- debilidad y
- colapso.
Los chicles, caramelos de menta y otros productos con xilitol, que es un edulcorante natural sin azúcar, pero tóxico para los perros. El xilitol provoca la liberación de insulina, en la mayoría de las especies, lo que conduce al fallo hepático. El aumento de insulina produce hipoglucemia (disminución de los niveles de azúcar). La sintomatología es
- vómitos,
- letargo y
- pérdida de coordinación
- convulsiones.
Las hojas y las partes verdes de los tomates son peligrosas para los canes. Los tomates pertenecen a la familia de las hortalizas de solanáceas, esto es que las plantas contienen componentes que son perjudiciales para ciertos animales, tale como la solanina, que se encuentra en el tallo y en las hojas del tomate, así como en otras plantas afines, en grandes cantidades es perjudicial para los perros.
Las patatas crudas y las plantas de patata son peligrosas para los perros por contener solanina. Las papas son de la familia de las solanáceas, tóxicas y sus frutos aun inmaduros contienen las mayores concentraciones de las toxinas y por tanto deben evitarse
El consumo de levadura, que está en la masa de pan sin hornear, puede causar la muerte en canes. La masa de levadura puede subir y por tanto hacer que se acumulen gases en el organismo del perro, que se hinche su estómago y pueda retorcerse.
De pequeños solemos alimentarlos con leche. Puede ser segura en pequeñas cantidades pero "como los animales domésticos no poseen cantidades significativas de lactasa (la enzima que descompone la lactosa de la leche), la leche y otros productos lácteos les provocan diarrea u otras molestias digestivas”, afirma la ASPCA.
El agua de coco tiene alto contenido de potasio, perjudicial para el perro. La pulpa y la leche de los cocos frescos tienen aceites que le pueden causar
- gran malestar estomacal,
- heces blandas o
- diarrea.
Las nueces pueden causar
- debilidad,
- depresión,
- vómitos,
- temblores e
- hipertermia en los perros.
Las almendras pueden
- obstruir el esófago o incluso
- desgarrar la tráquea si no se mastican completamente.
Las semillas de mostaza pueden ser venenosas para los perros según la Sociedad Humanitaria de Estados Unidos porque contienen “compuestos tóxicos que pueden provocar gastroenteritis, la inflamación del estómago y/o del tracto intestinal”, según se afirma en Rover.com, la “mayor red mundial de cuidadores de mascotas y paseadores de perros de cinco estrellas”.
Los hongos tóxicos pueden causar sintomatología grave e incluso la muerte. “Dependiendo del tipo/especie de seta ingerida, pueden verse afectados varios sistemas orgánicos generales: gastrointestinal (por ejemplo, vómitos, diarrea), sistema nervioso central (por ejemplo, ataxia, temblores, convulsiones, alteraciones visuales, agresividad, desorientación), hígado (por ejemplo, vómitos, heces negras y alquitranadas, aumento de los análisis de sangre de las enzimas hepáticas, insuficiencia hepática) o riñón (por ejemplo, anorexia, vómitos, sed o micción inapropiada, insuficiencia renal)”, indica la misma fuente.
La carne y huevos crudos pueden contener bacterias tales como la salmonela y la e. coli (Escherichia coli), perjudiciales para los perros. Los huevos crudos también tienen la enzima avidina, que disminuye la absorción de biotina (una clase de vitamina B), lo que provoca problemas en la piel y el pelaje, según informa la ASPCA.
Tampoco interesan a los canes los alimentos salados. “Grandes cantidades de sal pueden producir sed y micción excesivas, o incluso intoxicación por iones de sodio”, según la ASPCA. Deben evitarse los aperitivos salados, como las patatas fritas, las galletas saladas y las palomitas de maíz saladas, gusanitos... Los signos del consumo excesivo de sal en perros produce
- vómitos,
- diarrea,
- depresión,
- temblores,
- temperatura corporal elevada,
- convulsiones
- e incluso la muerte.
El ruibarbo puede ser tóxico pues contiene oxalatos de calcio solubles, presentes en distintos grados en todas las partes de la planta. Cuando se absorben las sales solubles de oxalato en el tracto gastrointestinal, vienen a unirse al calcio del organismo, esto provoca la caída repentina del mismo. Puede observarse insuficiencia renal aguda por la ingesta de plantas o frutas que tengan estos cristales de oxalato solubles.
Hay que tener cuidado también con los medicamentos para humanos. Aunque la investigación se hace testando en ellos después nadie de ellos se acuerda. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos advierte que los medicamentos destinados a las personas o a otros animales domésticos no deben administrarse a los perros excepto si lo indica su veterinario. “Por ejemplo, los antiinflamatorios no esteroideos para personas, como la aspirina, el ibuprofeno y el naproxeno, pueden no ser adecuados para su mascota e incluso pueden ser perjudiciales”, para el hígado sobre todo, según señala la FDA.