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Maltrato animal y medioambiental del ayuntamiento socialista de Juan Espadas



El PP ha denunciado el maltrato animal del ayuntamiento socialista de Juan Espadas en las gateras municipales del zoosanitario de Sevilla
 La noticia se ha difundido en okdiario. El PP de Sevilla ha vuelto a denunciar el maltrato animal del socialista Espadas en las gateras municipales de Sevilla, motivo por el que exigen que se construyan unas nuevas. En realidad no debería haber gateras o solo las necesarias para atender a los animales que puedan recorgerse enfermos en la calle, teniendo previsto su entrega a centros gestionados por animalistas que se encargarían del cuidado y búsqueda de adopciones para cada uno de los felinos que lo necesiten.

Se sacrifican animales cuando está prohibido terminantemente hacerlo. El Ayuntamiento de Sevilla no puede matar animales porque sí, ni siendo animales enfermos, lo que corresponde es tratamiento y curación.

El Ayuntamiento ha vecido cometiendo errores garrafales en este sentido, ha habido casos en los que la protectora de animales ha suministrado vacunas en mal estado y los animales han muerto, por ejemplo de parvovirosis, porque el veterinario municipal, que no dejaba entrar a los propietarios de las mascotas en la consulta, le suministró vacunación en mal estado, de manera que el animalito entró sano y salió vomitando y con la enfermedad inyectada. Cuando el Ayuntamiento debe ser el recurso y el consuelo al que asistir en momentos tremendos, esta barbaridad es lo que el ciudadano ha encontrado en ocasiones.

Ahora, El Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Sevilla ha exigido la construcción de nuevas gateras en el Zoosanitario, que además deben ser más numerosas o dejar de capturar a gatos, gatos sanos, gatos con dueños, gatos de colonias esterilizados y vacunados con señal en la oreja. ESO NO SE PUEDE HACER. Incluso si no lo prohbiera ninguna ley el Ayuntamiento debe ser ejemplar, no ponerse a capturar gatos como si no hubiera un mañana para después cobrarle a los dueños, a los voluntarios que mantienen colonias, o simplemente al ciudadano que se apiade de estas criaturas y tenga dinero para sacarlos de allí, esterilizados y con chip.

El ayuntamiento debe mirar más por la ética que por el bolsillo y pensar que en cada una de sus actuaciones está sirviendo de ejemplo, bueno o malo a la ciudadanía.

Las gateras están «en un estado deplorable por la nefasta gestión del gobierno de Espadas», «los aspersores no funcionan», los animales pasan calor y frío extremos, muchos son cachorros lactantes. Un maltrato animal en toda regla.

En nota de prensa, el PP explica que ha visitado el Centro Municipal Zoosanitario el concejal José Luis García, también lo han hecho colaboradores del PP; y ha podido comprobar «las precarias condiciones en que se encuentran los numerosos gatos recogidos en estas instalaciones, que son responsabilidad del Ayuntamiento de Sevilla».

Sin la acción de los voluntarios esto sería una pena mayor, mucho mayor, que la que es ahora. Gran parte de particulares, voluntarios altruistas, mantienen con su propio dinero y como pueden, la vida de estos amistosos y amorosos seres que no dan al humano más que ejemplo y cariño, dándole ejmplo cada día. Los voluntarios alimentan, asisten sanitariamente a los necesitados y enfermos, incluso pagan la eutanasia de los que padecen y no tienen solución, para que estos ángeles dejen de sufrir en este mundo tan cruel y tan asqueros que se ceba con los más débiles, con las almas más nobles.

Pero quíen ha dicho que el hombre es lo más de lo más de la creación, ...él mismo, no?... su soberbia infinita que lo ciega y lo confunde y que lo está haciendo destruir hasta el propio planeta¡¡.

García explica que esta situación de maltrato animal «se debe al incumplimiento del alcalde socialista, Juan Espadas, del compromiso asumido en 2018 de construir unas nuevas gateras que sustituyeran a las actuales, las cuales no cumplen las condiciones mínimas de bienestar animal exigidas».

También indica que la memoria del borrador del Presupuesto 2019, -que no llegó a aprobarse y se prorrogó el Presupuesto 2018-, recogía el compromiso de construir gateras nuevas, y señala que en la aplicación presupuestaria Inversión Nueva en Edificios y Otras Construcciones estaban previstos  80.000 destinados a afrontar las futuras obras de nueva creación, una mejora en los espacios para albergar determinados animales en el Centro Municipal Zoosanitario, principalmente gatos. «De hecho, a finales de 2018, el delegado de Bienestar Social, Juan Manuel Flores, responsable del Servicio Zoosanitario, anunció a bombo y platillo la pronta realización de las nuevas instalaciones de gateras». Pero, al parecer, «Espadas y su delegado responsable en la materia se olvidaron pronto de este compromiso, mucho antes de la llegada de la pandemia del Covid-19, pues en la memoria del Presupuesto 2020, que se aprobó en enero de 2020, no se hace mención alguna a la construcción de las nuevas gateras». Además, asegura García que la aplicación presupuestaria Inversión Nueva en Edificios y Otras Construcciones «ya no aparece provisionada con 80.000 euros, como en el borrador de 2019 sino, simplemente, con 100 euros».

Es por esto que «nos parece un absoluto desprecio a las necesidades de los felinos recogidos en este centro, que es competencia del Ayuntamiento de Sevilla. Es especialmente importante, a este respecto, la necesidad de contar con alojamientos individuales para evitar la proliferación de enfermedades, gateras en altura y habilitar una zona para cuarentena de gatos recogidos de la calle», según palabras de García, «tampoco se han adoptado medidas para la implementación del Método CER -Captura, Esterilización y Retorno-, para el control de colonias felinas, con la colaboración entre Ayuntamiento de Sevilla y entidades animalistas».

Igualmente, «se precisan instalaciones adecuadas para recibir a otro tipo de animales que suelen llegar como palomas, reptiles, aves exóticas o determinados mamíferos como cerdos vietnamitas».

El Ayuntamiento debe dejar de matar palomas y cotorras, porque realmente lo que está cometiendo es un crimen medioambiental. Hay que respetar sobre todas las cosas la naturaleza, el Ayuntamiento está ciego cortando árboles, construyendo, asfaltando y no cuida de la naturaleza en Sevilla. En vez de procurar integrar naturaleza y ciudad, en muchas zonas donde debería haber vegetación lo que hay es cemento, a veces pintado en verde, otras cesped artificial.

El clima está cambiando y si determinadas especies proliferan ahora más que antes es porque los trópicos se han dilatado, lo mismo que la gruesa franja ecuatoriana. Con el ascenso o dilatación de la franja tropical, las especies propias de ella se extienden igualmente. Las demás especies conviven con las otras nuevas o se desplanzas a zonas más altas. Hay que respetar a la naturaleza que es más sabia que el humano y estaba aquí antes que el humano llegara a ser la bestia en la que hoy se ha convertido.

El concejal del PP explicó que ha podido constatar «como apenas se han cumplido los acuerdos aprobados a instancias del Grupo Popular en el Pleno Municipal de 28 de septiembre de 2018», recordaba que la propuesta del Grupo Popular fue aprobada por unanimidad e iba dirigida a mejorar las condiciones de servicio municipal del Zoosanitario de Sevilla, las instalaciones y condiciones de vida de los numerosos animales que se encuentran en el mismo. Porque, por si el Ayuntamiento no lo sabe, estas instalaciones están para su protección, no para su destrucción, persecución, ni captura, ni sacrificio, ni tortura, ESTÁN PARA LA PROTECCIÓN DE LOS ANIMALES NO HUMANOS; «a día de hoy, aunque se han habilitado algunas mejoras, siguen sin corregirse importantes carencias, entre las que destaca la evidente falta del personal necesario para atender las necesidades de este servicio esencial». Los animales enfermos que necesitan urgente atención están en el suelo, sucios y en deplorables condiciones. Es que los funcionarios no tienen corazón en el cuerpo, puede preguntarse el lector.

El Zoosanitario precisa por lo menos cuatro peones de limpieza, veterinarios y un equipo comprometido en hacer el bien, algunos se piensan que es lo contrario. «estas funciones vienen siendo desarrolladas hasta ahora por oficiales que deberían estar dedicándose a otras tareas más específicas, en lugar de a retirar la suciedad».

La instalaciones del Centro deberían contar igualmente «con personal de seguridad, de la que carece, dada la enorme diversidad del público con el que tienen que tratar, entre los que se encuentran propietarios de perros potencialmente peligrosos, cuya agresividad no sólo se observa, a veces, en los propios caninos, sino también en sus propietarios». «Siguen sin atenderse las reclamaciones permanentes de los trabajadores, que piden la creación de nuevas plazas en plantilla, lo cual pasa por llevar a cabo de una vez la tan necesaria redacción y aprobación de una nueva relación de puestos de trabajo, para lo que sigue mostrándose incapaz la Delegada Municipal de Recursos Humanos, Clara Isabel Macías»

Continúa García. «Tenemos que destacar, sin embargo, la gran profesionalidad que demuestra el personal del Zoosanitario, que hace todo lo posible para paliar el déficit de recursos que sufre este centro, que es únicamente consecuencia de la incompetencia política de los responsables del Gobierno socialista de la ciudad, como son el alcalde y el delegado responsable del Centro Municipal Zoosanitario». Por todo lo cual ha exigido «al alcalde del PSOE que cumpla, construya las nuevas gateras en el Zoosanitario, así como que resuelva los graves problemas de falta de personal». «Ya está bien de marketing e incumplimientos», dice para finalizar.


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