Imagen cedida para este artículo cuya hora de realización se estima entre las 7´30-8´00horas Hace ya más de una semana que un amiguete del barrio está pasandolo mal. Se trata de un loro yaco que tiene su jaula grande de siempre, pero en estos días lo hemos visto penosamente encarcelado en una jaula de canario en vez de la suya de siempre, en la que si quiere sale y si no no, pero se puede mover y decidir si se pone un poco más acá o más allá. Como buen loro que es, saluda a los vecinos al paso cuando se acercan a su casa, él lo ve todo, desde la terraza del primero, a veces es temprano y no se ha levantado todavía, pero cuando pasas te saluda con algún silvido interesante, dice alguna cosilla y le ladra a los perros. Este bueno y simpático animal está ahora encarcelado y aprisionado en una jaula en la que no se puede mover. Los vecinos están indignados porque esa no es forma de tratar a una criatura. Si el dueño del loro se enterara (al parecer lamentablemente ha c...